¿Tienes alguna pregunta?
Mensaje enviado Cerrar

              Título original: A pesar de los progresos, el trabajo infantil sigue afectando a 138 millones de niños en el mundo
Publicado por: OIT/UNICEF
Fecha de publicación: 11 de junio 2025

En 2024, 138 millones de niñas y niños seguían atrapados en el trabajo infantil, de los cuales 54 millones realizan tareas peligrosas que amenazan su salud y desarrollo, advierten la OIT y UNICEF en su último informe “Trabajo infantil: Estimaciones mundiales 2024, tendencias y el camino a seguir”. A pesar de una caída de 22 millones de casos desde 2020 —que revierte el alza registrada entre 2016 y 2020—, el mundo aún está lejos de cumplir la meta de erradicar el trabajo infantil para 2025.

América Latina y el Caribe disminuyeron su prevalencia en 8 % y redujeron el número total de niños trabajadores en 11 %. Por otro lado, Asia y el Pacífico registraron la mayor mejora, con una reducción de la tasa de trabajo infantil del 5,6 % al 3,1 % (de 49 a 28 millones de niños). Sin embargo, África subsahariana sigue concentrando el 63 % del total (87 millones), donde el avance demográfico ha contrarrestado las reducciones en tasa (de 23,9 % a 21,5 %). UNICEF añade que, sin un financiamiento adecuado para educación, protección social y recopilación de datos, los avances corren el riesgo de retroceder.

Sectores y regiones clave

  • Agricultura sigue siendo el principal empleador infantil (61 %).

  • Servicios (trabajo doméstico, venta en mercados) representan 27 %.

  • Industria (minería, manufactura) acumula 13 %.

Desafíos pendientes

  • Alcanzar ritmos de progreso 11 veces más rápidos para cumplir la meta 2025.

  • Cerrar la brecha de género, pues si se suman las labores domésticas no remuneradas, las niñas terminan trabajando más horas.

  • Romper el ciclo intergeneracional de pobreza que obliga a las familias a enviar a sus hijos al trabajo.

Recomendaciones

  1. Invertir en prestaciones universales por hijo y otras transferencias sociales.

  2. Fortalecer los sistemas de protección infantil contra las peores formas de trabajo.

  3. Garantizar educación gratuita y de calidad, sobre todo en zonas rurales y de crisis.

  4. Promover el trabajo decente para adultos y jóvenes, con respeto al derecho a la organización.

  5. Hacer cumplir la legislación laboral y la responsabilidad empresarial en cadenas de suministro.

Solo con un compromiso continuo de gobiernos, empresas y sociedad civil podremos traducir la caída reciente en una erradicación definitiva del trabajo infantil.